El 1ero de noviembre de 2005 en el Concurso Panamericano del Humor que se celebró en Buenos Aires, Argentina, Laureano Márquez se hizo acreedor del primer lugar.
A los cinco años, se sabe la misa de memoria y rompe una cortina para hacer una sotana y disfrazarse de cura. A los seis años tiene su primera novia y cuelga los hábitos. Veinticinco años más tarde, llama la atención de otra mujer de la cual nace una hija igualita a su papá, cosa que la criatura lleva con resignacion.